E5T6. Disfagia con Gerardo Moreno. Encuesta del Consejo General de Enfermería. 3w482f

Buenas tardes, queridos oyentes. Bienvenidos otro día más a La Tirita, Enfermeras a pie de radio.

Es que lo echaba de menos, esto de subir y bajar música rocío. Si no recuerdo más del de un programa de nuestra primera temporada, hace ya seis años, no me ponía estos mandos y me hacía mucha ilusión volver a subir y bajar música. ¿Te ha parecido bien? Me ha parecido bien.

Fenomenal. Muy bien. Pues queridos oyentes, hoy es 2 de diciembre. Este es nuestro quinto programa de la sexta temporada. Y efectivamente, habéis podido comprobar que yo no soy Carmen Gijón. Nuestra jefa, la cual saludamos, hoy está en otros menesteres. Esta mañana ha estado en el programa de la SER, donde tenemos nuestra pequeña gran colaboración junto con Inés. Y seguramente esta tarde esté trabajando también Inés, seguro que está en esos menesteres. Así que un saludo para las dos. Esperemos estar este equipo a la altura de las circunstancias.

Pues eso es. Soy Miguel Ángel Muñoz y hoy me toca a mí presentar el programa, de lo cual estoy muy encantado.

Pero para ello no estoy solo. En este maravilloso espacio multicultural de vamos a montar un circo estoy muy bien acompañado, pues como no, por mis compañeras. Y empiezo a saludarlas.

Aquí a mi derecha tenemos, como siempre, a Rocío, a los mandos técnicos. Hola, buenas tardes Rocío.

Hola, buenas tardes.

¿Todo bien? Todo bien.

Nada, dispuesto a empezar esta tarde otro programita.

Vamos a ver qué tal sale.

Enfrente de mí está Belén. Buenas tardes, Belén.

Hola, buenas tardes, Miguel. ¿Qué tal? Pues bien, aquí vamos a ver cómo nos sale esto.

Escucha, yo creo que va a ser de los primeros o primeros últimos programas que vamos a grabar del tirón. Ya verás.

Sí, y tienes esa sensación.

Sí, porque va a ir todo del tirón y va a haber que editar poquísimo. Así que me lo pido Rocío.

Ah, mira, este va a tener menos trabajo que el anterior, que el anterior tuvo un poquitito más de trabajo.

Ya verás, ya verás cómo sí.

Vamos a ver cómo sale.

Bueno, también tenemos, como no, aquí a mi izquierda está Nuria, aún no puede hablar, pero la voy a saludar.

Y también, como no, pues también está Eva, que nos saluda con la mano.

Ahí está.

Muy bien.

Y nada, pues hoy, como siempre, tenemos un programa cargado de buena música y de temas muy interesantes a tratar.

No voy a destripar nada, no voy a destripar el contenido del programa, pero adelantaros que vamos a hablar de un tema relacionado con la alimentación, lo cual tenemos con nosotras a un invitado muy especial que podemos considerar ya como amigo y que me atrevo a subirlo pues a la categoría de colaborador incluso del programa.

Luego lo vamos a presentar, luego lo saludaremos más detenidamente, que se van a encargar en este caso Belén y Nuria de entrevistarlo y hablar un ratito con él.

Y en segundo lugar, un segundo tema a tratar, en este caso relacionado con nuestra profesión enfermera.

No os lo perdáis, porque va a ser una radiografía un poquitito de, pues eso, de cómo nos sentimos, de en qué situación trabajamos, en fin, va a ser va a ser un tema, un tema calentito de lo cual Eva tiene preparada la sección y seguro que la va a abordar como siempre.

Por cierto, saludos, ya que estamos en ellos, a nuestro colegio de enfermería que nos apoya en este proyecto de La Tirita.

Y ahora sí, vuelvo a saludar a Rocío, para cómo no, pues para que nos diga sus frases de la semana.

Bueno, pues otra vez, la tercera vez que hablo por este micrófono, pero ya me callo, hago las frases y ya, hasta luego.

Fijaos que la primera frase que traigo la voy a repetir, está repetida.

Esta frase sonó en el primer programa de La Tirita, allá por el 4 de diciembre de 2019.

Madre mía, en dos días cumplimos años, cumplimos seis años, madre mía, ¿quién lo iba a decir? Y bueno, aquel programa inauguramos La Tirita hablando de VIH, ayer fue el Día Internacional de la Lucha contra el VIH-Sida y bueno, pues no viene más repetirlo, visto las informaciones que hay por ahí, pues no sé, la pérdida de miedo o la falta de confianza.