
Descripción de Días tranquilos 181p1e
🎙️ DÍAS TRANQUILOS: UNA INVESTIGACIÓN QUE NUNCA DEBIÓ OCURRIR Todo empieza con algo inofensivo. Un blog olvidado, un par de fotos antiguas, una URL que nadie ha visitado en años. Algo sin importancia. Hasta que empiezas a mirar demasiado de cerca. Un grupo de estudiantes de periodismo encuentra un blog abandonado desde 2009. Sus entradas son extrañas: fotos sin contexto, fechas sin texto, detalles que parecen cambiar cada vez que vuelven a verlo. Pero lo que al principio es solo una curiosidad digital pronto empieza a torcerse. Hay imágenes que no deberían estar allí. Fotografías que no pueden existir. Y, lo peor de todo, desapariciones que el blog predice antes de que ocurran. 📻 Escucha el episodio completo y dime... ¿alguna vez has encontrado un rincón de internet que parecía mirarte de vuelta? 🔗 Disponible en iVoox y plataformas de podcast. 3o5m44
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Días tranquilos, el aula de periodismo tenía algo sofocante esa tarde.
No era sólo el calor leve y seco que parecía haberse acumulado en el aire, sino la sensación de que el espacio era ligeramente más grande de lo habitual, como si alguien hubiera retirado unas pocas filas de pupitres sin que nadie lo notara.
Las luces fluorescentes fallaban de vez en cuando, proyectando destellos fríos que se reflejaban en la pizarra digital.
En la superficie blanquecina y marcada por huellas de tinta vieja se leían en letras grandes y deslucidas.
La memoria de Internet, blogs, archivos ocultos y datos huérfanos.
Laura sostenía el bolígrafo sobre el cuaderno sin llegar a escribir nada.
Sus ojos recorrían la sala deteniéndose en la escasez de alumnos, en las filas vacías que parecían extenderse más de lo normal.
El sonido del proyector resultaba molesto, un zumbido constante que, por alguna razón, se sentía más cerca de su oído de lo que debería.
Internet tiene memoria, dijo el profesor Marqués, con voz neutra, apoyando ambas manos sobre el escritorio.
Hizo una pausa breve antes de continuar.
Creemos que cuando cerramos una cuenta o eliminamos un blog desaparece para siempre, pero no es cierto.
Un silencio incómodo se instaló en la sala, ese tipo de vacío que no se siente natural, como si alguien estuviera a punto de decir algo y se hubiera arrepentido en el último momento.
Diego, unas filas atrás, exhaló despacio y cruzó los brazos con desgana.
Algunos datos quedan atrapados en el limbo digital, continuó el profesor.
Registros sin dueño, imágenes sin origen, algunos de esos blogs...
Dejó la frase suspendida un instante demasiado largo.
Siguen publicándose mucho después de que sus creadores hayan desaparecido.
El aula se sumió en un silencio incómodo, no el tipo de silencio natural que se espera tras una pausa dramática, sino uno más denso, lleno de algo indefinido que se instalaba en el aire como si la misma sala estuviera reteniendo la respiración.
Diego exhaló con desgana y se pasó una mano por el rostro, incapaz de contener una mueca de hastío.
Clara tamborileó los dedos sobre su libreta sin escribir nada.
Raúl miró de reojo a Laura, pero ella seguía con los ojos fijos en la pantalla del proyector, como si algo en esa frase la hubiese atrapado.
Bien, prosiguió el profesor levantando la mirada hacia ellos.
Para el próximo seminario, quiero que elaboreis un informe sobre la persistencia de la memoria digital.
Comentarios de Días tranquilos 3q222w