Conciliación o sacrificio: la paradoja de la mujer - Viernes 02 de Mayo de 2025 p2c

Bueno, pues seguimos adelante, seguimos adelante y ahora tengo a Christy Zúñiga.

Ella es especialista en desarrollo humano, conferencista, además ha estudiado PNL y muchas otras cosas.

Y vamos a hablar de la conciliación o sacrificio, la paradoja de toda mujer.

Así que mándenos sus preguntas al 33 14 30 6 2 39, repito 33 14 30 6 2 39.

Mi querida Christy, muy buenos días. ¿Cómo estás? Querida Adriana, muy bien. Estoy muy feliz, contenta y agradecida por este día, por esta oportunidad, por tu espacio y pues por todas las cosas buenas que se vienen. Contenta.

Bendito sea Dios. A ver, a mí me gustaría, me gustaría. ¿Cuáles son? Que entráramos al meollo del asunto de cuáles son las, las.

¿Cómo diría con las palabras? Las cosas que más agobian, angustian, desesperan a nosotras las mujeres.

Híjole, pues si es como muchas, ¿no? Y yo creo que este tema va a ser muy interesante si lo empezamos a abordar desde una manera, como decíamos desde el título, ¿no? Ver qué es aquello que a nosotras las mujeres en esta actualidad, en este momento que nos está tocando vivir nuestra, nuestro ser mujer, nuestra ser esposas, nuestro ser profesionistas y sobre todo nuestro ser como mamás.

Entonces, son muchas las paradojas con las que vamos caminando, Adriana, que nos tocan el tema profesional, que nos tocan en el tema personal y que también, pues ha evolucionado con el paso del tiempo, ¿no? Este, este tema lo decidí elegir porque escucho en conversaciones, en sesiones de coaching con mujeres, con grupos de amigas, esta parte o esta exigencia del concepto de tenerlo todo, de querer tenerlo todo y que todo esté bien, que todo esté bajo control. ¿Cómo ha ido evolucionando hasta nuestros días de hoy? Y cómo, pues nosotros como mujeres y la participación que tenemos, por ejemplo, en el mercado laboral, toda la paradoja que hay en competencia y quién soy yo ante el mundo, todo esto que a nosotras finalmente nos agotan y ahorita es un agotamiento el que estamos viviendo como mujeres, como mamás.

En el rol que estemos jugando hay mucho agotamiento y mucho cansancio y mucho agobio, Adriana, pero más que nada es porque también estamos queriendo tener todo el barco en equilibrio y vienen muchas trampas, le llamo yo, en este tratar de tener el equilibrio. Entonces, me gustaría ir empezando a adentrarnos en este tema justamente con esto que yo lo considero como muy silencioso.

A veces el que ya nosotras nos hemos puesto una etiqueta de súper mujeres, que todo lo podemos, que todo lo logramos, que mejor solas, a veces caemos en esta trampa.

Yo le llamo como es un dilema silencioso de la mujer, de la mujer ideal, de la mujer moderna. Y me gustaría empezar también a pensar como de dónde viene todo esto, ¿no? De dónde es que tenemos que estar bien siempre, tenemos y podemos con todo, ¿de dónde viene? Pues, últimamente de nuestras generaciones a generaciones se ha ido, como tú bien lo sabes y todos lo sabemos, la mujer en su papel en la sociedad ha ido conquistando muchas cosas, ¿no? Ha ido avanzando, sí, en obtener muchos derechos, si nos vamos al tema sociopolítico, obviamente, en el tema laboral ha adquirido también ciertas libertades, ciertos espacios, sí.

No nos vayamos muy lejos, ¿no? El a la educación, el tema político, la autonomía con la que ahora la mujer, pues, gozamos y disfrutamos, ¿no? Que a diferencia de otras, de otros tiempos o de otras generaciones, pues, no se vivía, ¿no? Entonces, ahí es cuando comienza, Adriana, nuestro verdadero reto, porque al mismo tiempo que hemos adquirido todo esto que no se tenía, hemos soltado otros roles.

Hemos soltado otras prioridades como mujer, hemos soltado y dejado de lado algo que también es prioritario para nosotras y que por darle más énfasis a un tema social, cultural, nos hemos abandonado, hemos dejado de lado roles principales en nosotras las mujeres que tienen que ver primero con nosotras, con nuestro bienestar emocional y con nuestro esquema de valores.

A mí me vas a escuchar mucho hablar del tema de valores porque eso es lo que nos rige.