
Elizabeth Minda nos habla sobre un tema urgente y muchas veces invisible: las zoonosis, esas enfermedades que saltan de los animales a los humanos y que están más cerca de lo que creemos. 6a2ud
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Bienvenidos y bienvenidas internautas a un nuevo miércoles de podcast. Soy Elizabeth Minda y hoy les he traído el episodio de mi blog 100 y más zoonosis en alerta, lo que la leptospirosis nos recuerda sobre la salud compartida. Hoy hablamos de un tema urgente y muchas veces invisible, la zoonosis. Esas enfermedades que saltan de los animales a los humanos y que están más cerca de lo que creemos.
La reciente alerta sanitaria por leptospirosis en la Amazonía ecuatoriana con casos trágicos como la muerte de varios niños en Taisha nos recuerda que la salud no es sólo una cuestión médica, también es ambiental, social y animal. ¿Qué nos dice este brote sobre nuestra relación con el entorno? ¿Cómo prevenir futuras crisis? ¿Y qué papel jugamos todos y todas en esta historia? Hoy te lo cuento con datos, reflexiones y algunas pistas para actuar desde lo individual a lo colectivo. Comencemos.
En Taisha, una localidad amazónica de Ecuador, ocho niños han fallecido por leptospirosis, una enfermedad que muchos de nosotros nunca habíamos oído nombrar, pero que está más cerca de lo que creemos. Este brote ha encendido las alarmas sanitarias en el país y nos obliga a mirar con atención a un tema tan urgente como ignorado, las zoonosis. ¿Pero qué son las zoonosis? Una zoonosis es una enfermedad que puede transmitirse de animales a humanos.
La gripe aviar, la rabia, la brucelosis y ahora la leptospirosis tienen algo en común, no se originaron en nosotros, pero nos afectan gravemente. Estos saltos entre especies no son raros, de hecho, se estima que más del 60% de las enfermedades infecciosas humanas tienen origen animal. A medida que la humanidad ha expandido su presencia sobre el planeta, también lo han hecho las enfermedades infecciosas y muchas de estas han estado detrás de algunas de las pandemias más devastadoras de la historia.
La peste bubónica en la Edad Media, la gripe española en 1918, el VIH-Sida de los 80 y más recientemente la COVID-19 son ejemplos claros de cómo los saltos entre especies pueden tener consecuencias globales. Aunque no todos los brotes llegan a convertirse en pandemias, vivimos en una era de emergencia zoonótica constante, donde la vigilancia, la prevención y la cooperación internacional son más urgentes que nunca.
El punto es que, mientras mayor sea la población humana del mundo, más probable son las ocurrencias de pandemias. Con respecto a la leptospirosis, esta es una enfermedad causada por bacterias del género Leptospira, que se diseminan a través de la orina de animales infectados como roedores, perros o ganado, y contaminan el agua o el suelo. Las personas pueden infectarse al tener o con estas fuentes contaminadas, especialmente si tienen heridas en la piel o mucosas expuestas.
Aunque puede parecer una enfermedad rural, la leptospirosis está presente también en ciudades, especialmente en barrios con problemas de saneamiento, acumulación de basura, presencia de roedores y agua estancada. El cambio climático y las lluvias intensas agravan la situación. Las inundaciones ayudan a esparcir las bacterias y aumenta el riesgo de contagio. ¿Y por qué se disparan las zoonosis? Pues las enfermedades zoonóticas emergen y se propagan por varias razones, entre ellas la pérdida de hábitat y o con fauna silvestre, cuando destruimos ecosistemas, forzamos a los animales a convivir más cerca de los humanos.
Otro factor puede ser la ganadería intensiva y los mercados de animales vivos. En estos espacios se concentran especies diversas en condiciones que facilitan el intercambio de patógenos. Otro factor también puede ser el cambio climático, aumenta la temperatura y modifica los ciclos de lluvias, afectando la distribución de vectores como mosquitos o roedores.
Y también podemos considerar la falta de servicios básicos, sin agua potable, recolección de basura ni control de plagas, las poblaciones humanas quedan más expuestas. La leptospirosis no es sólo un problema médico, es una señal de advertencia de que algo en nuestro entorno está fallando, por eso cada vez más expertos impulsan el enfoque de una sola salud o One Health, que reconoce que la salud humana está profundamente conectada con la de los animales y el medio ambiente. Combatir zoonosis como la leptospirosis requieren más que medicina, implica mejorar el a servicios básicos, drenajes de agua, disposición correcta de la basura, controlar las poblaciones de animales transmisores, proteger el medio ambiente y por supuesto educar a la población.
Y ahora, ¿qué podemos hacer? Si bien hay medidas individuales que pueden ayudar, como la salud humana.