26 - Lo de el victimismo 5f2225

Pues estamos aquí de nuevo otra vez en otro programa, episodio, paranoia, capítulo de todo esta puto relacionado en Onda Plena Santa Cruz en el 107.4 de la FM. Hola a todos.

Hola a todas. Hemos vuelto otra vez. ¿Cómo estamos? Otro día más aquí, a la radio. Qué bonito.

Eso es estar en la radio. Que casi vinimos en canoa. Menos mal que ha escampado. Así que bueno, y hoy pues hemos decidido hablar de un tema que nos había propuesto una persona que nos oye.

Y ha dejado un comentario en uno de los vídeos de YouTube abajo para que hablemos de un tema que le interesaba. A todos y a todas que os interese un tema, nos lo podéis decir o personalmente si tenéis nuestro teléfono o si no, en comentarios. En comentarios en YouTube o en iVoox. O en el país.

O en donde queráis. O en el portal, no lo podéis dejar en el portal. O en el ascensor, ¿de acuerdo? Así que una de nuestras queridísimas seguidoras, follower, oyente, barra baja. Amiga, nos hizo la propuesta de hablar sobre el victimismo. Así que bueno, pues vamos a hacer una aproximación, como ya sabéis nosotros, desde nuestra profunda ignorancia. Y desde nuestra profunda experiencia con nosotras mismas, ¿sabes? Pero vamos, más que nada, desde la ida de olla esta que representamos, vamos a hablar de lo que para nosotros ha supuesto y supone todos los días de nuestra vida. El victimismo como lo entendemos y cómo nos relacionamos con él.

Y Ricardo, ¿cómo es el tema del victimismo para ti? ¿Qué entiendes tú por esto del victimismo? ¿Victimismo? ¿Mismo? Pues la verdad es que cuando nos propusieron el tema, dije, guau, qué tema más guay. Porque al final es algo como que muchas veces no profundizamos en él y no tenemos tanta visión de cómo lo transitamos.

Yo me he dado cuenta que durante mi larga vida, que ya son añitos, unos poquicos, 52, aunque no lo parezca y no os aparento, pero yo durante mucho tiempo he estado metido dentro de la parte del victimismo. Sobre todo el hacerme la víctima muchas veces, para reclamar atención o para reclamar que me vean o cuidados en ese sentido. Y también un poco para a la hora de, conmigo mismo, de autoconvencerme de muchas cosas que a lo mejor no era capaz de hacer y no podía lograr.

Y desde ese lugar me iba la parte de la víctima. Porque como yo soy así o no tengo esta capacidad o no tengo esta tal, era como que me iba siempre muchas veces a ese extremo. Me hago la víctima y desde ahí como que justifico.

Pobrecito yo, ¿no? Pobrecito yo, que claro, como no tengo esto o estos estudios o no tengo estas actitudes desarrolladas o fíjate dónde estoy.

Siempre había algo como que... y me iba mucho a ese extremo. Más que muchas veces hacerlo hacia el exterior, para mí siempre ha sido mucho más hacia mi interior, hacia mí mismo. Era como que me hacía la víctima a mí mismo. Entonces como que me autosaboteaba constantemente el cómo me estaba relacionando con el mundo. Y a veces aparece de nuevo, a veces aparece esa vocecita.

Entonces me he dado cuenta que al final, pues muchas veces lo que a veces esperaba también es que alguien me salvase de ese victimismo, ¿no? Entonces, como que tampoco me permitía el poderlo a lo mejor expresar en un momento.